
Noche insoportable en Yurimaguas

En esta pequeña anécdota contaré muy resumidamente lo que nos pasó en Yurimaguas y es que, por querer ahorrar demasiado en hospedajes nos salió el tiro por la culata.
Al bajarnos del ferri, David y yo comenzamos a caminar hacia el centro de Yurimaguas donde buscaríamos hospedaje cerca de la plaza de armas.
Eran más o menos las doce o la una de la tarde y como en la mayoría de pueblitos a esa hora, se estaba desmontando el mercado que abarcaba varias calles.
En una de esas calles dimos con un hospedaje realmente barato (después de haber preguntado precios en otros hospedajes), concretamente 15 soles por una habitación con dos camas lo que nos saldría a 7,5 soles cada uno.
Nos pareció una ganga porque teníamos el mercado en nuestra calle, estábamos a una cuadra de la plaza de armas y encima teníamos ventana y terraza lo que ventilaría nuestro cuarto.
MAAAAL!! Todo mal… pero para entonces todavía no sabíamos por qué.
Después de pasear por la plaza de armas donde conocimos a Emelin, fuimos a otro mercado que a diferencia de la mayoría, permanecía durante toda la tarde. Ahí probamos un par de frutas, compramos mapacho (tabaco de la selva) y cuando llegó la hora, fuimos a cenar.
De momento todo marchaba bien… incluso genial se podría decir ya que lo pasamos bastante bien tomando unas cervezas y charlando en un barecito en la plaza de armas pero, llego el momento de irnos a dormir y ahí fue cuando comenzó el caos.
Serían casi las doce de la noche y hasta literalmente las 3 y medía de la mañana no pudimos dormir por el calor que hacía incluso con las ventanas abiertas. El hospedaje no tenía ni un ventilador para prestarnos.
Nos pasamos el rato hablando de viajes y videojuegos mientras yo fumaba sentado en la ventana en busca de una brisa de aire.
Serían las tres de la mañana cuando decidimos intentar dormir y antes de que pudiéramos conciliar el sueño, una radio a todo volumen comenzó a sonar.
No nos lo podíamos creer… a esas horas estaban poniendo los toldos para el mercado, estaban montando sus mostradores y mesas donde ponen sus frutas, carnes y productos varios.
A las tres y media de la mañana había un escándalo en la calle imposible de creer. Y de las mototaxi ya ni hablar… esas no dejaron de pasar desde que llegamos al cuarto pero creímos que cesarían en algún momento de la noche, algo que no ocurrió.
Total que esa noche por 7,5 soles no dormimos nada. Debimos suponer que esa calle sería ruidosa con el mercado y que, si a las 5 y media de la mañana ya suelen tener todo listo es porque mucho antes comienzan a trabajar.
Lo de la radio fue la gota que colmó el vaso pero bueno, la apagaron una media hora después de haber pedido educadamente desde la ventana que la apagaran para poder dormir.
Para la próxima vez y sin dejar de evitar derroches económicos, al menos yo, tendré más en cuenta la ubicación de un hospedaje.
es que algunos estamos de vacaciones y pasandola lindo existe la otra clase recontra trabajadora que empieza el dia muy temprano y que viva el Peru carajo !
Entiendo que se requiera comenzar bien temprano para que a primera hora esté todo el mercado listo pero, eso no tiene nada que ver con poner la musica a todo volumen a esas horas… Podría usar audífonos/auriculares pero bueno. Al final aprendimos que es mejor no hospedarse en una calle donde va a haber mercado (algo que de primeras puede parecer ventajoso por la comodidad a la hora de salir a comprar).